Retroalimentación

Dialelo, el canibalismo de las merluzas y el vicio de los circulos.
Ejemplo:
El suicidio del fenix.

Vapor de mercurio.

Hojas de cálculo y el vapor de mercurio ilumina mi nuca.

Índices de Shannon, como si las diferencias se redujesen sólo a eso.

Acaricio al gato de Schrodinger y, vivo o muerto, ronronea.

Electrones enamorados de núcleos distantes.

Variables n-dimensionales limitan mi espacio, acción reacción, causa efecto.

Topología toroidal, termodinámica, física cuántica e incertidumbre.

No significan nada y lo son todo.

Me acerco al horizonte de sucesos y me arrastra el agujero negro,

Atraído por la gravedad de la enana blanca.

El caos lo es todo cuando mis circunstancias tienden a infinito,

Aleatoria y extraña poesía matemática.

E infinito es todo y todo es uno.

Fracciones infinitesimales del absoluto,

Falsa individualidad fundada en percepciones erróneas.

Suponiendo un sentimiento esférico de radio N.

Jugamos a comprender el mundo

Sin entender nada.

A veces todo es tan sencillo.

Soplo el diente de león y bailan en el aire las sombrillas voladoras de las hadas. Lleno de aire redondas bolas de agua iridiscente y gotea el jabón sobre la hierba. Y sentado entre las margaritas juego a ser una de ellas y a alimentarme del sol y mojarme el pelo con la regadera. Y le quito al perro su pelota y peleamos, y él me muerde de mentira y yo también y me lleno la boca de pelos. Grito, canto y nadie me mira. Entonces desafino y me río y ruedo por el césped. A veces todo es tan sencillo que nadie lo entiende.

Loco

Lo triste de aquella situación era que yo no podía hacer nada, escapaba a mi capacidad de control y a mis conocimientos teóricos sobre las relaciones humanas. Desconocía el significado de esa tensión que percibía en la sala como si pudiera olerla. La joven me miraba mientras la anciana murmuraba algo sobre fugas constantes y necesidad de internamiento psiquiatrico. Me acerque más a la ventana abierta y me colé por ella en la habitación. Tenía los pies sucios de caminar descalzo por la tierra húmeda. La chica seguía mirándome fascinada como si hubiese descubierto en mi cara la solución de una ecuación especialmente complicada. La anciana en cambio dio un grito y se puso a buscar en los cajones de las mantas. Entonces me di cuenta, había sido una estupidez salir de casa sin ropa solo para seguir a una mariposa. La señora me echo una manta vieja que picaba mucho por encima de los hombros sin parar de refunfuñar a voz en grito. Entonces la muchacha se volvió y me sonrió, nunca había sabido interpretar bien las sonrisas pero aquella me gusto. Yo sentía la mariposa aleteando en mi mano cerrada y ella me tendía la suya para llevarme de vuelta a casa. Quería interpretar sus gestos, conocer el origen de su ternura. Sin dejar de mirarla fui abriendo mi mano poco a poco hasta que la mariposa escapo y se puso a dar vueltas caóticamente alrededor de la lámpara.

La ilusión

Quien más, quien menos; todos vivimos en una ilusión. Todos nos engañamos voluntariamente para hacernos la vida mas fácil, algunos se engañan creyendo que todo el mundo los quiere, otros creen que leer el periódico los convierte en personas informadas. Algunos renuncian a ser especiales porque piensan que así serán aceptados y se olvidan de lo que realmente son. Sin embargo, la mentira que ella vivía era mucho más grande. Ella se perdía en los textos de autores ya fallecidos como si sus personajes pudieran abrazarla con brazos de papel. Mantenía apasionantes conversaciones con la televisión, rebatiendo los argumentos pronunciados por actores en blanco y negro.Entraba en los blogs de sus bandas preferidas y escribía comentarios llenos de pasión en busca de una cercanía que no se sentía capaz de conseguir fuera de la burbuja de mentiras que ella misma había construido.

Frío

Fuera hace frío. Quiero escapar de este libro, quiero salir de la cama, quiero abandonar esta cómoda prisión de cojines, calefacción central y paredes pintadas de colores. Quiero salir fuera. Quiero esperar bajo la nieve fumando un cigarrillo medio mojado. El tabaco sabe mejor con el aire frió. Quiero andar por las calles en esos días de invierno el los que el cielo es azul, el sol es radiante y la temperatura es bajo cero. Quiero perderme en la vida en una mañana helada hasta que se me agrieten los labios y no sienta los dedos. Quiero vivir una aventura, pero soy un cobarde.